Monólogo # 6 vs Bryan

Fue lindo de parte de ella.

Un lindo gesto que significa que está encontrando paz con si misma y que te está recordando con un cariño profundo, sin negar el daño que pudo exister de ambas partes.

Significa que mas allá de la distancia, encontró amor por ti, uno distinto, uno que palpita a una intensidad diferente, uno que te va a acompañar de por vida, el amor mas puro que puede dar un ser: el amor sin poseer.

Es una muestra de que está invitando a pertenecer a su vida como algo mas, una muestra profunda de agradecimiento y adminración, un perfecto mirar hacia atrás y sonreir en vez de llorar, de respirar en vez de angustiarse, ... ,de liberar en vez de amarrar.

La historia que tuvieron fue maravillosa y constructiva, una que marcó un antes y un después en las personas que son hoy y en las que serán mañana, una que los acompañará por siempre y que ya hace parte de ambos.

Se que duele, sobre todo en las noches donde los recuerdos cazan y la ausencia mata, donde por mas estables que estemos llega el recuerdo como un haz de luz, que atraviesa el cuerpo y rompe el alma, pero no es bueno ni reflejarlo, ni ignorarlo, ni sufrirlo, sino mas bien interiorizarlo, hacerlo parte del ser, y darle un espacio por siempre en tu alma.

Llegará un punto donde ese recuerdo ya no duela, donde la auencia no te mate y los recuerdos no te cacen, y ella te está invitandi ahí, aunque puede que ella tampoco haya llegado, y tristemente tampoco la podrás acompañar, porque el camino es el mismo, pero de distinto largo para cada uno, y no llega al mismo lugar.

Porque la parte del camino donde caminaron juntos ya terminó, y el resto del camino solo se tendrán en recuerdo, en espíritu y en alma, pero no en cuerpo.

Dolió, duele, y dolerá, no se si a mi ya me dejó de doler, o si simplemente aprendí a vivir con el alma rota, pero ahí en lo profundo de mi ser, donde nadie me ve, y nadie se imagina que existe mi yo, hay un espacio destinado para ese recuerdo en forma de haz de luz, y cuando penetra en mi alma, lo recibo con alegría y procuro mantenerlo por tanto como pueda, porque me hizo muy feliz, y lo sigue haciendo, porque se que ahí, en ese espacio infinitesimal del vacío donde se representa ese bello recuerdo puedo amarla, puedo sentir que estoy con ella a través de la distancia, en recuerdo, espíritu y alma, y que si me necesita estaré para ella, aunque nunca en cuerpo, y eso me hace feliz, porque con ella aprendí cosas de mi que no sabía, y gracias a eso hoy soy mejor, y lo seré en un futuro.

Hay un poder magnífico en el agradecimiento, y uno mucho mayor detrás de el, que te acompañará siempre si lo dejas llegar, y es ese amor puro, ese amor que ama sin poseer, que deja ser libre y que empuja hacia el futuro.

Es tiempo que la ames más que nunca, profunda y absolutamente, pero sin ella